Llega el sábado. Tras una semana de agua, vemos que el tiempo sigue sin dar tregua y cogemos el coche para dirigirnos a Cangues mientras cae el diluvio universal. Nos dan las 10 entrando en Cangues, somos puntuales por una vez a pesar de la tranquilidad con la que Santi afronta esta compe. Apenas 2 horas de entrenamiento en las últimas 3 semanas, un fin de semana en casa desconectando de Teberga y de la roca, un poco de desmotivación al no poder darle al proyecto ... aún así, está tranquilo. Yo, sin tocar una presa desde hace un mes, me olvido un poco de los exámenes, de los idiomas, de los/as niños/as en el cole y en Lumbre, y meto gatos y magnesio en la mochila con el fin de desconectar un poco.
Llegamos y nos encontramos con Cristian y María, motivados a tope. Al final decido no participar en la prueba, no sé si es cansancio, desgana o que me parecían inhumanos para mi situación física actual, así que decido dedicarme a hacer fotos. ¡Mierda! La cámara está loca. Pues nada, ni fotos!
Santi empieza muy bien, encadena al primer pegue 3 de los 9 pasos de absoluta masculina. Le da dos al planchón tras encadenar el de Dieguitis, y así suman 5 bloques encadenados en no demasiados pegues, así que contento con el resultado, aunque yo, personalmente, creo que podría haber hecho más si hubiese administrao bien la fuerza y la resistencia, ya que al estar sin entrenar creo que hay que medir ambas muy bien para no desfallecer a las dos horas de compe.
Salimos a echar un pitu, y ahí paramos de contar.
Buscamos algún sitiu donde comer y, tras recibir una grata e inesperada visita, nos vamos a ver las finales.
Muy prestoso ver representación asturiana en la final, tanto masculina como femenina, así que enhorabuena a Luis, Jairo, Laurina, María y Astrid! Y nada, las finales ya os podéis imaginar, muy fuertes ellas y ellos, da gusto verlos y verlas, son un chute de motivación.
Y ahí van unas fotos hechas por María, Gracies titana!
Un saludo, Alba.
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